La intersección de la igualdad de género y la sostenibilidad
La ONU ha declarado un lema para el Día Internacional de la Mujer 2022, y puede resultar sorprendente para algunos: "Igualdad de género hoy para un mañana sostenible".
¿Cuál es exactamente la relación entre sostenibilidad e igualdad de género?
En las últimas décadas, los investigadores han explorado la narrativa del cambio climático desde una perspectiva de género más matizada. Han descubierto que las mujeres son las primeras y más afectadas por el cambio climático.
El cambio climático tiene un enorme impacto en los pobres del mundo, y dado que el 70% de los pobres del mundo son mujeres, esto hace que el desarrollo sostenible sea decisivamente una cuestión de mujeres.
A continuación figuran algunos ejemplos de la relación entre el cambio climático y la situación de las mujeres y las niñas en el mundo.
El cambio climático arrebata un estatus económico ganado a pulso y empleos más valorados
Arohi, madre de tres hijos de la zona rural de Assam (noreste de la India), perdió su empleo en la producción textil porque el aumento de las temperaturas y los niveles de humedad han afectado negativamente a la producción de la "seda muga" que utilizan los tejedores. Las mujeres en su situación suelen verse abocadas a los trabajos peor pagados de la construcción o, de lo contrario, al mercado informal por carecer de educación y cualificaciones.
El cambio climático afecta desproporcionadamente a la mujer cuidadora
Tras el paso del huracán María, Valeria continúa con las tareas domésticas, exponiéndose al agua contaminada y a enfermedades. Al igual que otros caribeños más pobres, su familia vive en una ladera deforestada e inestable.
El cambio climático incide directamente en la violencia de género
Debido a la sequía en Fiyi, Tala tiene que caminar muchos kilómetros para conseguir agua. Esto aumenta su exposición a secuestros y violaciones, frecuentes en la zona. Y tras el tifón Haiyan en Filipinas, Mary Joy, de 14 años, se ve obligada a prostituirse para alimentarse y alimentar a su familia.
Estas historias demuestran cómo el desarrollo insostenible y las catástrofes naturales asociadas al cambio climático destrozan la vida de las mujeres. En todo el mundo, estos fenómenos aumentan la mortalidad infantil, el matrimonio infantil, la trata y otras formas de violencia de género. Las mujeres también se encuentran entre las personas más afectadas por el cambio climático porque suelen ser las responsables de la alimentación y el agua de los hogares. En tiempos de escasez, las mujeres de la familia deben emprender acciones cada vez más arriesgadas para satisfacer las necesidades básicas de su familia.
Dado que las mujeres están tan expuestas a los efectos del cambio climático, es fundamental incluir sus puntos de vista en la planificación, elaboración de políticas y aplicación de medidas relacionadas con el clima. Pero en todo el mundo, e incluso en el mundo desarrollado, las mujeres están infrarrepresentadas en las organizaciones responsables de la formulación de políticas y en los campos STEM relacionados con la energía sostenible.
Cuando las mujeres han podido desempeñar un papel en la respuesta al cambio climático, los resultados han mejorado notablemente. Según la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático:
La ONU ha elaborado una lista de objetivos para abordar el problema de la igualdad de género y la sostenibilidad en muchos frentes. Sus objetivos para 2030 reconocen síntomas como el trabajo de cuidado no remunerado, las dinámicas de poder doméstico, las rígidas expectativas sociales, la falta de educación y la falta de acceso a los recursos, y pretenden abordar cada uno de ellos.
La buena noticia es que cada vez más mujeres de todo el mundo lideran movimientos y elaboran estrategias para solucionar este problema que afecta a todas nuestras familias, comunidades y recursos limitados.
Sobre la autora: Mallika Sen es ingeniera en la zona de la bahía. Le encanta leer, ver Netflix y planificar cosas, pero no simultáneamente. Tiene muchas "microaficiones", un término que se ha inventado para describir su costumbre de investigar o practicar intensamente un nuevo tema o actividad durante unos meses o más antes de pasar al siguiente. Cree que esto añade perspectiva y emoción a la vida y le encantaría compartir lo que aprende por el camino.
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